En diez pacientes de cáncer, ¿cuáles son sus posibilidades de curación mediante remedios espirituales?

La respuesta a esta pregunta debe enfocarse desde varios puntos de vista. La interacción entre todos ellos es compleja y ningún factor puede contemplarse de forma aislada.

Por favor, léase también el artículo Factores que afectan a la efectividad de los remedios espirituales.

Con relación a los diez pacientes de cáncer, deben tenerse en cuenta las siguientes consideraciones a la hora de evaluar sus posibilidades de curación mediante remedios espirituales.

1. El papel del destino como la causa y la cantidad correspondientes de práctica espiritual requerida.

Las enfermedades potencialmente mortales como el cáncer siempre son sucesos predestinados. Nos referimos a que son una parte de la vida que tenemos que sufrir como resultado de nuestras acciones pasadas y que ya están decididas en el momento de nuestro nacimiento. Pueden aportarnos felicidad o dolor.

Por favor, léase también la sección sobre el destino y, en especial, las causas raíz espirituales de las dificultades en la vida.

Cuando decimos que el cáncer está predestinado queremos decir que su causa raíz, es decir, el destino, es de naturaleza espiritual. Por lo tanto, sólo puede superarse completamente mediante la práctica espiritual , que es una forma básica de remedio espiritual. Por favor téngase en cuenta que nos referimos a la práctica espiritual conforme a los seis principios básicos de la práctica espiritual

Según la intensidad del destino será necesaria una cantidad correspondiente de práctica espiritual, la cual o bien

•            Anula el destino, en cuyo caso el cáncer se cura, o bien
•            Aísla el destino, de modo que no debe sufrirse la angustia que conlleva padecer cáncer.

 

Si el cáncer se debe a:

• Un destino leve: En tales casos, el cáncer se diagnostica en un estadio temprano, antes de que ocurran cambios irreversibles, generalmente es benigno, es decir, no se ha extendido a otros órganos y su pronóstico es bueno (con posibilidades de recuperación). Para superar este tipo de destino leve y así curar el cáncer se requeriría una práctica espiritual regular moderada (4-5 horas diarias).

• Un destino moderado: En los casos de cáncer debido a un destino moderado, la enfermedad se detecta tarde, cuando ya se han producido cambios orgánicos. Para superar este tipo de cáncer se requeriría una práctica espiritual regular intensa (10-12 horas diarias).

• Un destino severo: En este caso el cáncer suele ser maligno, se detecta tarde, cuando ya se han producido cambios irreversibles, y su pronóstico es malo. Para superar la enfermedad se requiere una práctica espiritual intensa durante largo tiempo y la gracia de un Santo o de Dios.

En los casos de destino severo, los Santos no suelen interferir con el destino, a menos que exista un motivo muy fuerte, por ejemplo que la persona esté realizando una práctica espiritual intensa para alcanzar a Dios y que el hecho de prolongar su vida curando el cáncer sea una buena oportunidad para que ésta crezca espiritualmente.

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2. ¿Cuáles son las otras causas raíz espirituales que desempeñan un papel en nuestro destino?

Si el destino está desempeñando su papel a través de un ancestro o fantasma que está causando el cáncer, el diagnóstico de este aspecto espiritual y su tratamiento adecuado, ayudan a aumentar su efectividad y a reducir el tiempo de curación. En tales casos, a la práctica espiritual deberá añadirse el remedio espiritual específico para superar dicho factor espiritual.

En los casos de cáncer debido a un destino severo o a un fantasma, es posible que el diagnóstico se retrase, reduciendo así las posibilidades de curación.

 

3. El momento en que se inicia la práctica espiritual

Dependiendo del momento en que se inicia la práctica espiritual se puede evitar completamente una enfermedad predestinada o bien reducir su intensidad. Su intensidad se verá reducida de forma directamente proporcional a la calidad y a la cantidad de la práctica espiritual realizada respecto a la severidad del destino.

Tomemos el ejemplo siguiente:

• Juan padece cáncer de estómago.

• El cáncer se inició en Enero de 2004 y se diagnosticó en septiembre de 2005 como “cáncer de estadio II“.

• Evolucionó a “cáncer de estadio III“ en enero de 2007.

• La causa fundamental espiritual es un destino moderado. No existen otros factores espirituales que compliquen el caso.

• De las 100 unidades de dolor/infelicidad que Juan está destinado a sufrir en su vida actual, el cáncer supone 10 unidades.

 

Veamos el efecto de varios escenarios posibles con relación al momento en que empieza su práctica espiritual y a su intensidad:

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Del cuadro de arriba se desprende que siempre es mejor prevenir que curar. Siempre es mejor errar de precaución, realizar una práctica espiritual regular y progresivamente más intensa. Con ella se anula nuestro destino y crecemos espiritualmente cumpliendo así nuestro propósito en la vida.

 

4. ¿Se ha producido degeneración orgánica?

Si se ha producido daño o degeneración orgánica, en la mayoría de casos, los cambios no pueden revertirse con remedios espirituales, incluso si la causa del daño orgánico se encontraba originariamente en la dimensión espiritual. Sin embargo, la intensidad de la enfermedad puede reducirse.

 

5.Estado de cuentas kármicas con el médico

El estado de cuentas kármicas con el médico es otro factor a tener en consideración. Si es negativo, es posible que a pesar de que el médico cuente con muchos años de experiencia, se le pasen por alto ciertos aspectos clave de la enfermedad que aumenten el sufrimiento del paciente. En cambio, si es muy positivo, el médico parecerá tener un toque de oro a la hora de prescribir el tratamiento.

Esto explica porqué a veces un paciente puede empeorar a manos de un médico. Aparentemente puede parecer que se deba a una negligencia por parte del mismo, sin embargo, a un nivel espiritual, en la mayoría de casos puede ser que se estén saldando cuentas negativas. El estado de cuentas kármicas también determina el que elijamos a un médico antes que a otro.

 

6. Resumen

• Todas las enfermedades potencialmente mortales como el cáncer tienen una causa raíz espiritual y están predestinadas.

• Los factores que afectan a la curación del cáncer son complejos y la comprensión de la ciencia moderna se limita únicamente a las dimensiones física y psicológica.

• Complementar el tratamiento médico con práctica espiritual y remedios espirituales, aumenta los índices de curación o, en casos de destino severo, al menos ayuda a reducir la intensidad de la enfermedad.

• Una curación del 100% es posible si se produce lo siguiente:

 

1.      Se realiza un diagnóstico específico de la causa raíz espiritual del 100%.

2.      Se aplica un remedio espiritual específico, se lo aplica en la cantidad necesaria y durante el tiempo necesario en un 100%.

• Y por último, y más importante, si tenemos en cuenta cómo vivimos nuestras vidas desde la perspectiva espiritual del propósito de la vida, en la mayoría de casos la gente no tiene el propósito de crecer espiritualmente. Desde una perspectiva puramente espiritual, entonces no importa si a una persona con una enfermedad grave se le conceden 4 o 5 años más de vida, pues en cualquier caso los desperdiciará o los dedicará simplemente a perseguir objetivos mundanales. Sin embargo, si la persona es verdaderamente un aspirante espiritual y necesita unos años más en la Tierra para realizar práctica espiritual y alcanzar así, reinos más elevados tras su muerte física, Dios mismo le concede una prórroga en la vida.