Tabla de contenidos
1. Introducción
Durante nuestras acciones en la vida diaria, cosechamos las consecuencias de esas acciones como méritos y pecados. Los méritos y pecados determinan la cantidad de felicidad o tristeza que experimentamos. Por tanto, es importante saber cómo evitar acciones pecaminosas. Aunque la mayor parte de la gente lucha por tener una vida feliz, quienes tienen el deseo de crecer espiritualmente pueden querer saber por qué los méritos también deben evitarse en el camino espiritual hacia la realización divina.
2. Definición de mérito y pecado
El mérito es la consecuencia de un acto virtuoso, por el cual experimentamos felicidad. Los méritos son la energía especial que conseguimos o la habilidad que desarrollamos al seguir con dedicación un estilo de vida adecuado. Por ejemplo, ayudar a nuestros amigos dándoles apoyo económico o consejos, brinda un mérito. La rectitud y la conducta recta se han escrito a gran detalle en un gran número de textos sagrados. A través de los méritos, producimos bienestar a otros. Por ejemplo, al dar un donativo a una institución de caridad que ayuda al tratamiento del cáncer, puede aliviar a un gran número de pacientes que lo padecen, lo cual a su vez nos trae méritos.
Un pecado es la consecuencia de una mala acción y nos trae tristeza. Los pecados se generan por acciones que dañan a otros, y también por acciones en las que ignoramos las Leyes de la Naturaleza y de Dios. Por ejemplo, el vendedor que abusa de sus clientes cae en pecado. Los pecados también se generan cuando uno no cumple con sus deberes. Ejemplo: Cuando un padre no satisface las necesidades de sus hijos o un médico no cuida de sus pacientes.
Los méritos y los pecados se pueden enfrentar en esta vida, en el más allá, o en una de nuestras siguientes vidas.
Los méritos y los pecados son mucho más sutiles que la cuenta del toma y daca, puesto que es bastante fácil entender la cuenta del toma y daca, por ejemplo, dentro de una familia. Sin embargo, es más difícil entender por qué alguien podría haber insultado a un extraño.
3. Causas del mérito y el pecado
Hay un gran número de razones por las que uno puede incurrir en un mérito. Las más comunes son:
- Realizar actos de benevolencia
- Seguir una conducta recta descrita en los textos sagrados
- Sacrificarse por el bien de la práctica espiritual (sādhanā) de otra persona. Por ejemplo: una nuera que se toma un tiempo libre de su trabajo para cuidar de las tareas de la casa, mientras que su suegra se va a una peregrinación; en este caso la nuera obtiene la mitad del mérito que la suegra logra por ir a una peregrinación. Sin embargo, en lo posible, no se recomienda hacer práctica espiritual dependiendo de otros.
Algunas de las razones por las que caemos en pecado son:
- Egocentrismo y deseo, en la forma de enojo, avaricia y envidia que llevan a una persona a pecar
- Carecer de principios o ser cruel
- Hablarle de manera irrespetuosa a un desamparado
- Comer carne y beber alcohol
- Vender artículos prohibidos, no pagar deudas, realizar operaciones ilícitas, apostar
- Dar falso testimonio o acusar falsamente
- Robar
- Adulterio, incesto, violación, etc.
- Violencia
- Asesinato de animales
- Suicidio
- Gasto inapropiado o apropiación de riquezas pertenecientes a Dios, un templo, organización espiritual, etc.
- Algunos abogados caen en pecado cuando proyectan la verdad como algo falso y viceversa
- Un esposo incurre en la mitad del demérito de su esposa si no evita que ella cometa pecados, lo cual lo hace partícipe de los mismos
- Una esposa que gasta el dinero que su esposo ha obtenido de manera incorrecta, sin objetarlo a pesar de saberlo
- Asociarse con un pecador, lo cual hace que uno se convierta en parte de sus pecados.
4. Efectos del mérito y el pecado
4.1 Efectos del mérito en forma de felicidad
Dependiendo de la cantidad de mérito, una persona experimenta la correspondiente felicidad proporcional en esta Tierra (Bhūlok) como se ve en la siguiente lista, y finalmente por los méritos obtenidos por esas acciones durante la vida en la Tierra, se puede obtener la felicidad en el Cielo (Swarga):
- Nacimiento en una familia adinerada y culta
- Ingresos crecientes
- Placeres terrenales
- Cumplimiento de deseos
- Una vida sana
- Reconocimiento y alabanzas por parte de la sociedad, organizaciones y gobierno
- Progreso espiritual
- Disfrutar del Cielo después de la muerte
Nacer como humano, nacer dentro de una familia de buen linaje, tener riquezas, longevidad, un cuerpo sano, buenos amigos, tener un buen hijo, encontrar una pareja amorosa, tener devoción a Dios, inteligencia, cortesía, triunfo por encima de los deseos y una inclinación a ofrecer a quienes lo merecen, sería imposible lograr sin el mérito obtenido en encarnaciones anteriores. Cuando todo lo anterior está presente, el individuo que se beneficia de ellos y que realiza práctica espiritual, logra progreso espiritual.
Cuando el mérito colectivo aumenta, la nación se destaca en su filosofía y conducta y es próspera.
4.2 Efectos del pecado en forma de infelicidad
Trataremos este tema con mayor profundidad en nuestro próximo artículo sobre Las Consecuencias del Pecado.
5. ¿Cómo se obtiene el mérito y el pecado?
Para entender los conceptos de mérito y pecado, es importante entender la intención detrás de cualquier acción. Esto se podrá entender mejor en la siguiente tabla, en la cual se muestra la actitud detrás de la acción de ganar dinero y la intención de gastarlo, en diversos ejemplos. La gravedad del pecado y del mérito se muestra en el siguiente ejemplo.
6. Limitaciones del mérito
Desde la perspectiva del crecimiento espiritual, existen algunas limitaciones en cuanto a los méritos.
6.1 La consecuencia del mérito se debe experimentar
Una vida llena de méritos lleva a la región del Cielo después de la muerte, pero una vez que el mérito se ha agotado, la persona tiene que regresar a la Tierra en su próximo nacimiento. Por tanto los méritos también son una especie de atadura. Sólo la práctica espiritual nos lleva a la Liberación Final (Moksha).
6.2 Experimentar la felicidad, eventualmente reduce el mérito
A medida que experimentamos cada momento de felicidad, nuestro mérito se va terminando, por lo que uno debe trabajar para incrementar el mérito. Esto es posible a través de acciones meritorias o práctica espiritual. La diferencia es que las acciones meritorias brindan felicidad, mientras que la práctica espiritual general progreso espiritual, lo cual trae Beatitud, la cual está más allá del mérito y pecado, y de la felicidad y tristeza. Como resultado, se logra la felicidad.
7. Resumen – mérito y pecado
Entender la diferencia entre méritos y pecados, además de la profundidad y la duración de su efecto en nuestras vidas, nos ayuda a orientar nuestra conducta y nuestras acciones. Sin embargo, para liberarnos de ambos, es necesario realizar práctica espiritual regular.
“Por naturaleza, ni el mérito es salvador ni el pecado es destructor, solamente la emoción espiritual (bhāv) es salvadora por naturaleza.” – Su Santidad Kane Maharaj, Narayangaon, Pune, Maharashtra, India